LOS FINANCIERS DE AVELLANA DE PHILIPPE CONTICINI


Ya sabéis que #Aquínosetiranada :o)

Y al igual que le doy un repaso a la despensa “seca” (de allí las natillas de pistacho) también le doy un buen repaso al congelador 2 veces al año. En el último repaso caí en que tenía varias claras esperando su hora y la ocasión me la dió una amiga que estaba de visita por la ciudad y vino a visitarme.

Con poco tiempo por delante pero con ganas de tener un detalle con ella, me fui directa a descongelar las claras (en esta receta, con ponerlas en una bolsa de plástico en agua caliente es suficiente) y a preparar estos deliciosos bocados de uno de los más grandes maestros de la repostería, Philippe Conticini. Soy una gran fan y sus recetas nunca me defraudan.

Esta receta en concreto es de lo más sencilla, su único punto técnico delicado es conseguir una rica mantequilla avellanada, o sea tostada pero no quemada. El truco consiste en mezclar con las varillas la mantequilla derretida a fuego medio alto para que no se quemen las proteínas quedándose en el fondo al contacto directo de la llama.

Después se mezcla todo y para el horno. Tibios es como más me gustan pero fríos están muy ricos y además se congelan maravillosamente bien para siempre tener uno a punto para acompañar el café de media tarde.

Si os gusta hacer dulces con claras, no dejéis de ir a ver la pannacotta tradicional con sus fresas especiadas, los macarons bolitas, el bizcocho de avellanas y claras, el tronco de crema de limón y merengue suizo y como no, la Bica blanca de Laza.

La receta se suma naturalmente al 1 +/- 100 Desperdicio 0 de Marisa de este mes.

¡Feliz miércoles a tod@s!

FINANCIERS DE AVELLANA DE PHILIPPE CONTICINI

Para unos 15/20 dependiendo de los moldes

78g de mantequilla

110g de azúcar glas

78g de harina de avellana (yo suelo moler avellanas crudas con piel y dejar trocitos sin moler)

40g de harina

1 pizca de flor de sal

110g de clara de huevo a temperatura ambiente

½ cc* de extracto de vainilla

En un bol grande, mezclamos con las varillas el azúcar glas, la harina de avellana, la harina y la flor de sal. Reservamos.

A fuego medio alto en una cazuela pequeña calentamos la mantequilla removiendo sin parar con las varillas hasta que tome un bonito color dorado y que empiece a oler a avellana tostada. Es importante remover para evitar que se queme y que el color sea homogéneo. Colamos enseguida en un bol para que no se queme en la cazuela caliente.

Añadimos las claras y la vainilla a la mezcla de harina, azúcar glas y harina de avellana. Mezclamos bien y añadimos la mantequilla tostada todavía caliente. Mezclamos bien y vertemos la mezcla en moldes de tamaño individual (usé el de muffins medianos) previamente engrasados con spray desmoldante.

Horneamos con horno caliente ventilado a 170º durante unos 15/20 minutos pero el tiempo exacto dependerá mucho del tamaño de vuestros moldes. Ojo que no hay que cocerlos en exceso para que queden bien tiernos y jugosos.

Desmoldamos en seguida y dejamos templar sobre una rejilla.

Se conservan perfectamente 2 o 3 días en una caja cerrada herméticamente y varias semanas en el congelador.

Bon profit!

Algunas explicaciones útiles o no tan útiles

*cc: cucharita de café

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10 Comments

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  • Marisa G., 24 de marzo de 2022 Responder

    Hola Palmira. Desde esta mañana que tengo ganas de comentar tu receta. La he visto en el móvil, pero quería leerla con detenimiento antes de comentar y en el ordenador es mejor..
    Ya sabes que aunque no vivo en Francia, me encanta y sigo desde hace mucho su gastronomía, también a algunos chefs, panaderos y reposteros.
    Has elegido una receta de Conticini estupenda. Los finaciers con ese sabor a mantequilla tostada y avellana, se elevan a otra categoría. Ya me gustaría poder probar uno.
    Como siempre, es un placer tenerte en 1+/- 100, más con esta delicia.
    Besos y gracias mil.

    • Palmira, 28 de marzo de 2022 Responder

      Es un placer participar Marisa, tengo mucha pena viendo que la mayoría de las personas no saben hacer cocina de aprovechamiento más allá de recalentar (incluso hay gente que tiene manía a lo de recalentar, y tiran directamente la comida!!!). Con lo bien que se puede comer usando cositas que sobran o a punto de caducar.
      Y volviendo a la receta, Philippe Conticini es uno de los grandes pasteleros franceses y es muy generoso así que antes de que la cosa estuviera de moda por los confinamientos lleva varios años haciendo vídeos en directo y compartiendo su sabiduria. De aquí esta receta de aprovechamiento de la que nadie se entera que lo es (que es así que debe de ser cuando se hace bien, seguro que estás de acuerdo!).
      Besos y feliz semana,
      Palmira

  • NombreVictoria, 18 de marzo de 2022 Responder

    Que ricos ,me estoy imaginando el sabor de las avellanas........
    Besitos ¡¡

    • Palmira, 23 de marzo de 2022 Responder

      Es una receta buenísima por que además de sencilla tiene un sabor a avellana brutal delicioso.
      Besos,
      Palmira

  • Marhya, 16 de marzo de 2022 Responder

    ¡Qué ricos!! Hace bastante que no hago repostería entre la falta de tiempo y que me joroba poner el horno solo para dos con la luz como está, pero con lo que me gustan las avellanas me la apunto para cuando vaya a hacer varias cosas.
    Besos.

    • Palmira, 17 de marzo de 2022 Responder

      Suelo aprovechar el horno al máximo así que mientras aso las verduras tengo patatas o pescado haciéndose y con el calor residual preparo los dulces. Al final sumando así los horneados se consume menos al evitar el desperdicio de calentar el horno desde la nada.
      Es la repostería que me gusta, sencilla y muy rica.
      Besos y feliz fin de semana,
      Palmira

  • la cuisine de poupoule, 16 de marzo de 2022 Responder

    Ils sont bien beaux ces petits financiers
    Bonne journée
    Bisous

    • Palmira, 17 de marzo de 2022 Responder

      Un régal!
      Bises,
      Palmira

  • kasioles, 16 de marzo de 2022 Responder

    Tiene que ser un bocadito delicioso, para mí sería una adicción, me encantan las avellanas.
    Te dejo un fuerte abrazo y agradezco tu receta.
    Cariños.
    Kasioles

    • Palmira, 17 de marzo de 2022 Responder

      Son toda una delicia, para acompañar el café. Pero tienen mucho peligro porque cuesta comerse solo uno ;o)
      Besos y feliz fin de semana,
      Palmira