Hace unos días, publiqué la receta de la crema helada de calabacín y edamame y pensando en otras recetas con el rey del verano, 
, me recordé de este chutney que preparamos el verano pasado con los kilos y kilos de calabacines que nos trajimos del huerto de mi tía.
Es una maravilla para acompañar cualquier carne a la plancha, con una cucharada, una sencilla y aburrida pechuga de pollo se convierte en un plato fashion :o) Además es una idea estupenda para regalar durante las próximas navidades, es el momento perfecto para ir preparándolos, con tiempo y los calabacines a muy buen precio.
Y quiero aprovechar esta receta para apoyar la iniciativa de los agricultores de fruta y verdura ecológica de Freshvana de donar una parte de su producción a comedores sociales. Cada blog que publique una receta para esta causa hará que incrementen su donación de 20 kg…. Ya sabes, ¡súmate!
Para más recetas con calabacín, ya sabéis, sólo tenéis que pinchar aquí o en el logo:
CHUTNEY DE CALABACÍN MUY ESPECIADO*
Para unos 5/6 botes pequeños
600g de calabacín pelado una tira si una tira no y sin semillas si es de los grandes
300g de cebolla
½ cc** de semillas de mostaza
½ cc** de jengibre en polvo
1 cc** de cúrcuma
2 guindillas “peperoncino” (muy pequeñas pero matonas)
70cl de vinagre de vino blanco
2 clavos de olor
3 granos de pimienta
250g de azúcar moreno
100g de azúcar para mermeladas
Cortamos los calabacines en trocitos pequeños y los espolvoreamos con un poco de sal. Dejamos que suelten el agua unas 12 horas.
Al día siguiente, los aclaramos con abundante agua y los secamos muy bien.
Pelamos la cebolla y la cortamos en láminas finas.
Juntamos la cebolla y el calabacín en una olla pequeña. Diluimos las especias con parte del vinagre y las añadimos en la olla. Añadimos lo que nos quede de vinagre y calentamos hasta que rompa a hervir.
En este momento, añadiremos el azúcar moreno y el azúcar para mermeladas y dejaremos cocer a fuego muy suave entre 60 y 90 minutos, mezclando regularmente, hasta que espese.
Si nos gusta un chutney con trozos pero meloso, trituramos como una tercera parte de la cantidad, mezclamos todo, damos otro hervor y envasamos como si fuera mermelada.
O sea que vertemos el chutney todavía hirviendo en los potes previamente escaldados y los dejamos boca abajo.
Esperamos por lo menos 48h antes de pasteurizar*** el chutney si no lo vamos a consumir en unas semanas. Así durará 2 o 3 años… ¡si no te lo comes antes!
Y ahora toca esperar un mes por lo menos para se acaben de sentarse los sabores :o)
Bon profit!
Algunas informaciones útiles o no tan útiles
*La receta se inspira en una receta del Larousse de las Mermeladas, aunque que hice algunos pequeños cambios.
**cc: cucharita de café
*** Pasteurizar mermelada casera – El método en imágenes está aquí.
Suelo usar menos azúcar en mis mermeladas que en las recetas clásicas. Para que me duren meses (¡e incluso años!) a pesar de esto, siempre las esterilizo. ¿Cómo? Es muy sencillo: en la olla presión, 5 minutos al 2. ¡Y ya está! Así las puedo conservar varios años: algunas que se habían escondido incluso me duraron 3 años (más la verdad es que no lo sé porque ¡¡¡nunca he tenido mermeladas que duren tanto!!!).
12 Comments
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aghhh, me ha dado error y ahora ya no sé si se ha publicado el comentario.
Si si se publicó el comentario... ya estaba empezando a hacer cambios en el blog y tuve muchos mensajes de error pero normalmente ya todo tendría que volver pronto a la normalidad !
Besos,
palmira
¡Qué rico, Palmira! Este año estamos tan retrasados en la huerta que todavía estamos con los primeros calabacines, pero de aquí a poco me pondré a preparar para guardar.
Besos.
¡Me alegro mucho que te guste Marhya! Si este año me han comentado varias veces que además de atrasada la huerta está produciendo algo menos. Pero seguro que tienes ya miles de ideas para
sacarles partido a tus maravillosos calabacines cuando empiecen a sobrar jejeje
Besos,
palmira
No puedo dejar de visitaros con estas increibles recetas, que tengo ganas de hacer, he visto muchas veces lo chutney que hasta hace poco no conocía y me han encantado, además es una maravilla que
hagas esta entrada para una causa solidaria, muchas empresas tendrían que hacer lo mismo, que la crisis es muy fuerte en este país, besos
Sofía
El chutney es una buena manera de darle un aire de fiesta a cualquier pechuguita o pechuga a la plancha o al vapor :o) Un poco de alegría y mucho sabor por poquitas calorías siempre es algo que
se aprecia, ¿verdad?
Su iniciativa me ha parecido muy buena, así que si se puede ayudar, hay que participar, estemos donde estemos!
Besos,
palmira
Los chutneys siempre dan alegría a los platos, con las carnes, sobre todo el pollo y el cerdo combinan muy bien, perotambién quedan exquisitos con arroces o patatas hervidas.
Besos.
A mi me encantan con el pollo y el pavo... pero ¡nunca los he probado con patatas! Así que me apunto la idea porqué me parece fantástica!
Un poco de alegría en el plato, siempre viene bien, ¿verdad? Más en estos días que hay tanta gente pasando hambre cerca de nosotros.
Besos,
palmira
Una buena colaboración!!!Me ha encantado la idea y tiene que estar de bueno!!!!!!Apuntado queda!!!Un besazo guapetona
Es una idea para sacarle partido a los calabacines del huerto cuando se disparan y no haya quien dé abasto con ellos :o)
Además no conozco nada mejor que un chutney para alegrar una pechuguita a la plancha... ¡o una cesta navideña!
Besos,
palmira
Palmira, ya veo que te has sumado a esta iniciativa. No hay fronteras teniendo los medios virtuales de los que disponemos y esté una donde esté.
Me gustan muchísimo los chutneys. Lo descubrí desde que hice el de tomate, me reafirmé con el de cerezas, y últimamente con el de mango. ¡Qué rico! Y es que a quienes nos gustan las especias, es
difícil no acertar con nuestros gustos y un chutney.
Un beso.
Pues si, tan pronto como pude pillar una conexión internet busqué en mis archivos para poder participar. Es verdad que hoy en día no hay excusas para no participar!!!
El de mango es brutal, con foie es una de las mejores combinaciones que conozca jejeje Los descubrí hace muchos años en un restaurante que sólo proponía platos al vapor y siempre los adornaban
con chutney... desde entonces en casa no suelen faltar y caseros, ¡claro!
Besos,
Palmira